2012.

Este año, no se si ha sido el mejor, para mi todo sigue igual. Todo esta exactamente donde lo dejé, mi libro del Fantasma de la Ópera en el segundo cajón de mi estantería. Mi chicles donde siempre. Mi Winni en la estantería lleno de polvo, sin un brazo. Mi caballo medio roto y viejo, donde siempre, deseando que pase el tiempo para que se haga mas viejo, o que vengan mis primos pequeños y le destrocen mas aun. Mi habitación sigue igual de revuelta. Nada cambia en un segundo. Y menos aún porque cambie de año. ¿En realidad que importan los años no? Lo que importa es que.. lo hayas disfrutado como nunca. Que consigas, que hasta ese viejo caballo de la habitación, disfrute cuando alguien lo monta, aunque le destrocen.

Todo tiene su lado positivo. Lo único que hay que hacer es mirarlo de otra manera. Y si la vida te resulta difícil, solo hay que conseguir hacerla fácil.

Belleza interior.

Alguna vez te has muerto de ganas de ir
Más allá del mundo que crees conocer
y ser cautivado por la llamada 
de la belleza interior.
Deja que te atrape, 
pasa por el lugar donde empiezan los sueños.
Siente de lleno la intensa atracción, 
por la belleza interior. 
Cuando la oscuridad despliega sus alas, 
¿sientes las cosas más extrañas?
Cosas que nadie adivinaría, 
cosas que las palabras no pueden expresar.

Tan solo hazlo tú.

Volviendo a soñar entre mis sueños. Volviendo a amar a mi amor. Volviendo a escribir sobre mis palabras. Solo tú haces que estas palabras tengan vida. Solo tú haces, que estos sueños, vuelvan y tengan sentido. Solo tú consigues que el amor, sea una razón para ser feliz. Solo tú llegas a lo más tierno de un corazón pobre. Volviendo a sentir, lo que hace años estaba muerto. Gracias.

Seguiré siendo la misma.

Si, otra vez, vuelvo a sentir aquella sensación, la que hacía que mis pequeños ojos verdes lloraran, no sé exactamente por qué…no sé si es de tristeza, alegría, compasión o rabia…

¿Tristeza? No me da tristeza que mi padre me haya estado jodiendo la vida.

¿Alegría?  Llorar por alegría... hace tiempo que no lo hago.

¿Compasión? Si, podre llorar por eso, Pequeñas lágrimas al ver que el ser que admirabas te alza la mano, al ver que te volverá a hacer daño.

¿Rabia? Si, Puede ser, porque a veces me gustaría, que el daño que me ha hecho, se lo pudiera dar yo…

Nadie me dice que esto solo es por una razón, Nadie me dice que esto me hará más fuerte, de que la vida te da palos para que el día de mañana aprendas a no cometer los mismos errores. Pero ¿para qué preocuparse? Si, al fin y al cabo, seguiré siendo la misma chica de siempre. La que llora sin miedo, la procura evitar todo tipo de problemas para que no la haga más daño, la que seguirá pudriéndose, poco a poco, y cada vez más, hasta que llegue su fin.